La leyenda de Norberta y el General Oribe.


Hace ya más de 25 años, el genealogista Carlos Gavier Olmedo escribió un interesante libro sobre su familia, los Gavier, y sus enroques con otras familias cordobesas, incluido la nuestra, los Moyano. En el libro se relata una interesante y dramática leyenda familiar que tiene como protagonista a dos Moyano Deheza, Norberta y José Santos, y al General Oribe. El libro es difícil de conseguir y por eso reproducimos aquí su relato.




Contexto geográfico: Mapa de 1866 del norte de la Provincia de Córdoba, donde se muestra la geografía en donde se desarrolla la leyenda. En el Portezuelo (de Macha) estaba ubicada la estancia de Gil Moyano Cornejo, el bisabuelo de nuestros protagonistas y el primero de nuestros Moyano, que nace en Córdoba, en 1667. Su nieto Gregorio Salvador Moyano Cabrera era un rico hacendado, radicado en la zona y estaba casado con su pariente Justa Deheza Moyano. Era dueño de varias estancias que fueron heredadas por sus hijos: Norberta heredó “Los Talas” y José Santos, “La Curtiduría” en Totoral. Estas estancias eran desprendimientos de un gran establecimiento, “San Esteban de Totoral”, que a comienzos del siglo XV fue desarrollado a partir de la “Encomienda del Valle de Cavisacat” comprada por Pedro Luis de Cabrera, un hijo de Jerónimo, el fundador de Córdoba.

Contexto histórico: En 1831, durante el enfrentamiento entre la Liga del Interior (unitarios) y el Pacto Federal, Córdoba está bajo control unitario, pero con el asedio de las tropas de Estanislao López y Juan Manuel de Rosas. El 10 de mayo, el General Paz, jefe militar de la Liga, cae prisionero y sus dos lugartenientes, los generales Lamadrid y Román Deheza, primo de los Moyano Deheza, deciden retirarse hacia el norte. Por desavenencias entre ellos, Lamadrid se queda a cargo del ejército y Deheza se exilia en Perú. Para 1840, la provincia es gobernada por el caudillo federal “Quebracho” López y en octubre, cuando el ejército de Lamadrid, que avanza desde la Rioja llega a Córdoba, se produce una revolución de los unitarios locales, que destituye al gobernador. Este nuevo gobierno dura poco, porque el General Lavalle, viniendo desde el litoral para unirse a Lamadrid, es derrotado en Quebracho Herrado, por el General Oribe que lo venía persiguiendo. Superados por las tropas federales, los dos generales deciden replegarse hacia el norte, permitiendo el regreso del gobernador y la represalia contra los que se habían sublevado y sus partidarios. Es en este contexto de finales de 1840 en que se desarrolla la leyenda de Norberta.  

   



Una cosa que la leyenda no cuenta es que los hermanos Moyano Deheza eran primos del General Román Deheza, el lugarteniente del General Paz, algo que no favorecía a su situación. Aunque era dueño de la estancia “La Curtiduría”, en los tiempos de la leyenda José Santos y su cuñado veinteañero vivían en Tulumba, a unos 30 km al norte de “Los Talas”. El niñito que se menciona, sería Nemesio González Moyano, que tendría entre dos y tres años en esos tiempos. Norberta murió al año siguiente, a sus 46 años y aunque José Santos sobrevivió al enfrentamiento entre unitarios y federales, no pudo escapar de la tragedia y murió en 1867, en la epidemia de cólera que azotó Totoral. Su hijo mayor, Gregorio, es nuestro bisabuelo.



Tomas Nores Caballero - Gustavo Nores Moyano